Buscar en este blog

Alfred Rosenberg, Diarios

Alfred Rosenberg, Diarios 

(Referente a España)


- En España, el general Franco no quiere saber nada de antisemitismo. No está claro si por respeto a sus judíos marroquíes, que tienen que pagar diligentemente, o porque todavía no ha comprendido que hoy en día el judaísmo se está vengando de Isabel y Fernando. Hace un año, el joven Primo de Rivera vino a visitarme. Un tipo inteligente y claro: católico (pero no clerical); nacionalista (pero no dinámico). Tampoco él se pronunció sobre la cuestión judía. Ojalá el delirio asesino de los judíos no se salga con la suya. Es comprensible que los españoles sientan rabia hacia la iglesia, que ha embrutecido y explotado a su pueblo y lo ha consolado con la promesa del cielo. Ahora, el bolchevismo judío está azuzando esa lógica rabia para sus propios intereses. Si los generales ganan, ¿sabrán distanciarse de la iglesia? (23 Agosto 1936)

- Estos tipos se merecen que se los trate como en Madrid y Barcelona. La iglesia de Roma es la principal culpable del desamparo de España. Por eso, asisto a la tragedia española con sentimientos contradictorios. Si el clericalismo acaba venciendo, se vengará de un modo infame. Si los generales vencen, espero que sean capaces de comprender las necesidades de nuestra época y mantengan el catolicismo de su pueblo -porque el catolicismo es la religión nacional de los españoles y los italianos- pero aparten para siempre a los sacerdotes del estado y del gobierno popular. De lo contrario, el gran inquisidor, el inquisidor general de Schiller, volverá a reducir almas. (29 Agosto 1936)

- Ayer R. Strunck* regresó de España. Era tal la preocupación que sentía ante determinados acontecimientos que decidió tomar un vuelo directo a Berlín. Mañana viajará de vuelta. Ha expuesto su preocupación en un extenso memorándum. Ojalá consiga su propósito. No entraré a explicar aquí los detalles de su informe, porque no tendría mucho sentido hacerlo, pero sí diré que lo que cuenta es espantoso. Ha sido testigo de terribles mutilaciones a los nacionales, a veces en formas que revelan patologías sexuales prácticamente imposibles de describir. El estado en el que ha encontrado a las monjas asesinadas es terrible. Y resulta difícil hacerse una idea del modo en que se han profanado los altares…

Strunck ha conseguido sobrevolar el Alcázar junto con el “especialista de Toledo”. Todos los expertos habían descartado la posibilidad de lanzar víveres a un patio de 60 x 40 metros. Pero alguien logró hacerlo, desde una altura de 25 metros: el teniente v. Moreau, un hombre cuyo nombre no se dará a conocer hasta dentro de mucho, mucho tiempo. Otra novedad es que las tropas fascistas han expulsado a los rojos de Baleares. Malzahn me ha informado desde Roma de que en los círculos de los dirigentes fascistas se habla constantemente de la intención de Italia de anexionarse estas islas. En su posición actual, será interesante ver si se podrá volver a empujar a Italia y, de ser así, con qué medios será posible hacerlo. Los franceses cada vez brindan más apoyo a las tropas de Madrid. Quieren convertir a la gente de las milicias en auténticos soldados. Franco se afana por evitar que se llegue a una guerra de trincheras, ya que los marroquíes están especializados en la guerra de movimientos. Por lo demás, Strunck no duda de que los generales obtendrán la victoria. Calculan que la guerra civil durará unos dos meses más.

Evidentemente, la información sobre las tensiones que, sin duda alguna, existen en las filas de los nacionales ha despertado mi interés. Strunck me ha confirmado mi impresión de que en el norte la iglesia y la Restauración quieren presentarse como herederas de las víctimas. Los carlistas están obligados a asistir diariamente a misa y se pasean por ahí con un montón de amuletos colgados; ¡hasta los burros llevan imágenes de Cristo alrededor del cuello! En cambio, los falangistas atraen cada vez a más personas y Franco los ayuda considerablemente. Por tanto, hay que dar por descontando que después de la victoria se desencadenará una lucha, lo que supone que será necesario apoyar a Franco con todos los medios posibles si queremos evitar que España viva otros treinta años de dominio eclesiástico y se repita la situación actual o el país acabe pudriéndose. El joven Primo de Rivera se encuentra preso en Alicante. Se tiene la intención de liberarlo (¡si es que aún está vivo!).

Por lo demás, la gente está deseando recibir periódicos y películas alemanas. Nos piden maestros para organizar el partido, etc. Basta con decir qué es alemán para que los españoles griten de júbilo. Hitler es un mito. Todas las esperanzas están puestas en Alemania.

Le he presentado Strunck a Darré, que quiere enviar inmediatamente  a España a un hombre que analice en detalle la situación del campo y prepare para Franco una reforma agraria adecuada para el país. Hay algo que está muy claro: las 34 familias a las que pertenece España deberán entregar, como dueños absolutos, el 50% de sus tierras sin imponer demasiadas condiciones. Hay que suprimir la segunda causa de la revolución.

Le he dicho a Strunck que debe explicarles a Franco y a los líderes falangistas lo siguiente: inmediatamente después de la victoria, la iglesia iniciará una salvaje campaña de difamación contra nosotros, la “Alemania pagana”. Por eso, queremos dar nuestra repuesta desde ahora mismo: la tradición de Alemania es diferente de la de España. Se trata de un país mayoritariamente protestante, que hoy cuenta con nuevo conocimiento, del que extrae ciertas lecciones para si misma. Pero únicamente para sí misma. Reconocemos el catolicismo como religión del pueblo español y nadie desea inmiscuirse en ese terreno. Hay que dejarlo claro desde ya para que los falangistas puedan dar una respuesta a los clericales. 

Por lo demás, resulta interesante que los españoles quieran saber menos del fascismo que nosotros. Tienen un temperamento muy parecido al nuestro y esperan de nosotros que los complementemos y, así, los ayudemos. Han elegido autodenominarse nacionalsindicalistas. 

Así pues, en este rincón de Europa se está librando una nueva y decisiva batalla. Una España aliada de Alemania significara, a ojos de París, el desgarro de un flanco que siempre ha considerado seguro. Para Inglaterra, supondría la posibilidad de que a las espaldas de Gibraltar gobernase  en estas circunstancias un amigo de Italia. Por eso, los franceses y los ingleses harán todo cuanto esté en sus manos para, al menos, convertir a Cataluña en un estado de contención.

*Strunck Roland, corresponsal del VB en la Guerra Civil Española. (26 Septiembre 1936)

- La iglesia pierde cada vez más poder en todo el mundo: en España, todo el pueblo - y no solo los bolcheviques- es, en esencia, anticlerical. En Rusia, la iglesia está vencida. De hecho las iglesias ya no tienen anda que ver con la religión, sino que utilizan la fe exclusivamente para los fines de su política de poder.  (18 Enero 1937)

- Bernhard informa en detalle desde Salamanca acerca de la situación en España. Franco sigue bien, pero existen recelos en relación con su entorno: los reaccionarios y el Vaticano. Franco ha organizado una votación entre sus obispos : el 85% está a favor de él y el 15% del Vaticano. En Pamplona, un obispo hizo el saludo fascista y el pueblo acogió su gesto con gran entusiasmo. Le he explicado a B. que un líder falangista del ala más extrema ha elaborado un informe pormenorizado en el que describe con precisión a los cincuenta miembros del consejo de estado Español. B. considera que la mayor parte de su contenido es correcta, especialmente en lo que se refiere a la crítica de un español que estuvo en Nuremberg y que, tras el último discurso del congreso, se puso hecho una furia: “¡Esto es una nueva religión!”. El lunes leerá en mi residencia el informe que el líder falangista ha adjuntado en castellano (informe de los jesuitas para el Vaticano).

Bernhardt quiere que El Mito se traduzca al español. Sin embargo, creo que todavía es demasiado pronto como para publicar el libro en el extranjero. De todas formas, no estaría de más ir preparando ya varias traducciones, por si acaso tenemos que hacer uso de ellas rápidamente. (27 Noviembre 1937)


- Acabo de recibir la visita del representante del líder de los falangistas, que ha subrayado que la lucha de la Falange no empezará realmente hasta que la guerra no haya acabado. Le he hecho ver las dificultades, con toda probabilidad importantes, que encontrará el ministro falangista de Agricultura y he observado que es preciso atajar de un modo drástico las causas sociales de los levantamientos anarquistas si no se quiere que dentro de veinte años vuelva a estallar una revolución. El señor… está totalmente de acuerdo conmigo. Cree que en el futuro la fuerza de la Falange residirá en los obreros, que viven en las tres grandes capitales, aún en manos de los rojos. Asegura que la Falange podría asumir como propias muchas reivindicaciones de los trabajadores. No en vano, ya lo ha hecho en la práctica. Solo queda proceder a un cambio para que todo ello se asiente sobre una base española y no internacional, es decir, ¡para ser socialistas y nacionales!

Hizo hincapié en el gran interés con el que había escuchado mi discurso en la asamblea cultural. Me pareció importante aclararse que las tradiciones alemanas tienen implicaciones diferentes a las españolas en lo que respecta a la concepción del mundo, por lo que nunca ha sido nuestra intención ejercer influencia en este terreno. Él me dio entonces una respuesta que demuestra que en la Falange las fuerzas consecuentes están vivas. G. aseguró que el papa de Roma es un viejo rojo-liberal y que lidera una internacional comparable a la de los masones y marxistas. La Falange, sostiene, es católica, pero no tiene la intención de someterse a un papa de Roma. Siguiendo órdenes, una representación de la Falange viajó en cierta ocasión a Roma, pero no fue recibida por el papa. Añadió que el Santo Padre siempre es un italiano y que ellos aspiran a crear una jefatura eclesiástica con sede en Toledo. En definitiva, también aquí se observa una evidente tendencia nacional-eclesiástica. La Falange considera que no pueden haber caído en vano un millón y medio de españoles, y que es necesario evitar que se repita el proceso que ha conducido hacia la catástrofe. Nos separamos con la promesa de desarrollar en el futuro una estrecha colaboración y le deseé que la Falange logre una victoria también en la lucha que librará más adelante. 

Será necesario apuntalar esta lucha falangista desde el punto de vista de la historia de España. Tal vez a través de la presentación del adopcionismo, que Carlomagno, al frente de su estado teocrático, persiguió como gran herejía y que más tarde estuvo presente en las guerras de los cátaros y otras. Encargaré que se comprueben estos datos. (7 Octubre 1938)

- Reconocemos a todos los pueblos de cada nación. No queremos inmiscuirnos… Desde el punto de vista histórico, los pueblos no tienen más que una alternativa: o ser aniquilados por Rusia o ponerse bajo la protección alemana y perder así su soberanía en materia militar y de política exterior, aunque conservando su carácter, su existencia y su trabajo. (Mayo 1939)

- Tener un papa español propio en Toledo, como dijo Primo de Rivera, ese sería el único objetivo posible, para poner gradualmente fuera de juego la nefasta intromisión del eterno desintegrados de todo crecimiento orgánico. (29 Julio 1943)