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Milagros de vida, J.G. Ballard




- Supongo que los dirigentes japoneses habían decidido que Shanghai les resultaba más valioso como próspero centro comercial e industrial, y todavía no estaban preparados para exponerse a un enfrentamiento con las potencias occidentales. La mayor parte de mis primeros recuerdos datan de este periodo. La vida en Shanghai parecía una sucesión interminable de fiestas, bodas suntuosas, galas en el club de natación, proyecciones de películas en la embajada británica, espectáculos militares representados en el hipódromo, elegantes estrenos cinematográficos, todo ello bajo las bayonetas de los soldados japoneses que vigilaban los puntos de control dispuestos alrededor de la colonia. 

- A pesar de mis heroicos viajes en bicicleta, mi aislamiento de la vida china era casi total. Viví en Shanghai durante quince años y no aprendí una sola palabra de chino. Aunque mi padre contaba con numerosos empleados chinos y había recibido lecciones de chino, jamás pronunció una sílaba de aquella lengua a ninguno de nuestros criados. Yo nunca tomé comida china, ni en casa ni durante las múltiples visitas a hoteles y restaurantes que hice con mis padres y sus amigos. 

- Admiraba a todo el que tuviera la capacidad de poner nerviosa a la gente. 

- Los británicos tardarían años en recuperarse de lo ocurrido en Dunkerque, y los ejércitos alemanes ya se habían adentrado en el corazón de Rusia. Pese a mi admiración por los soldados y pilotos japoneses, era profundamente patriótico, pero me daba cuenta de que el Imperio británico había fracasado. 

- Había visto a los soldados japoneses de cerca y sabía que eran más fuertes, estaban más disciplinados y contaban con un mando mejor que los soldados británicos y estadounidenses de Shanghai, que parecían aburridos y únicamente interesados en volver a casa. 

- La sensación de que la realidad era un decorado que se podía desmontar en cualquier momento, y de que, por muy espléndido que algo pareciera, podía ser barrido con los restos del pasado. 

- En la primavera de 1943 yo estaba encantado de poder disfrutar al máximo de mi nuevo mundo. 

- Tengo la impresión de que durante el primer año de internamiento, la vida en el campo fue tolerable para mis padres y la mayoría del resto de adultos.

- Yo también hice amistad con varios jóvenes guardias japoneses. Cuando estaban fuera de servicio, los visitaba en los bungalows del personal, a cincuenta metros del bloque G, y me dejaban meterme en sus bañeras de agua caliente y ponerme sus trajes de kendo.

- Yo sabía que podían ser brutales, sobre todo cuando actuaban bajo las órdenes de sus suboficiales, pero por separado eran relajados y simpáticos.

- La consecuencia más importante que el internamiento tuvo para mí fue que por primera vez en mi vida estaba muy unido a mis padres. Dormía, comía, leía, me vestía y desnudaba a escasos centímetros de ellos en la misma habitación pequeña, como las familias chinas más pobres que tanta lástima me daban en Shanghai. Pero disfrutaba de aquella proximidad, que imagino ha constituido una parte central del comportamiento humano a lo largo de la evolución. Cuando estaba tumbado en la cama por la noche podía alargar el brazo y coger la mano de mi madre, aunque nunca lo hice. 


- Puede que el campo de Lunghua fuera una especie de cárcel, pero era una cárcel en la que yo encontré la libertad. Mis padres siempre estaban cerca para contestar cualquier pregunta que me pasara por la cabeza… De ninguna manera me consideraba un inadaptado (lo que sin duda ocurrió cuando fui a Inglaterra en 1946).

- A pesar de la escasez de comida del último año, los inviernos glaciales (vivíamos en edificios de hormigón sin calefacción) y la incertidumbre del futuro, fui más feliz en el campo de lo que lo fui hasta que me casé y tuve hijos.

- No recuerdo que mis padres me dieran nunca comida, y estoy seguro de que ningún padre compartía su ración con sus hijos. Todas las madres que se encuentran en campamentos para prisioneros o zonas asoladas por la hambruna saben que su salud es crucial para la supervivencia de sus hijos.

- Afortunadamente, las bombas atómicas de Hiroshima y Nagasaki pusieron un fin repentino a la guerra. Al igual que mis padres y el resto de personas que sobrevivieron a Lunghua, he defendido desde hace mucho tiempo el lanzamiento de las bombas estadounidenses. 

- Por muy valientes que fueran, los soldados y pilotos japoneses pertenecían al pasado. Yo sabía que Estados Unidos era el futuro que ya había llegado. Me pasaba todo el tiempo libre mirando al cielo. 

- Shanghai no tardó en abrir todas sus puertas y encender dos sus luces, y recibió a sus nuevos visitantes estadounidenses como era tradicional en ella, con miles de bares, prostitutas y casas de juego.

- La familia alemana que vivía en la casa de enfrente fue expulsada, y dos oficiales de inteligencia estadounidenses muy simpáticos ocuparon su lugar.

- Los estadounidenses formaban parte de la administración de Shanghai y me llevaban con ellos en sus trayectos por la ciudad, durante los que visitaban las prisiones militares donde estaban encarcelados los soldados japoneses y los colaboradores chinos en las condiciones más espantosas. 

- La sensación de poder de Estados Unidos era abrumadora. 

- Nadie podía imaginar que las luces de Shanghai permanecerían apagadas durante décadas cuando los comunistas liderados por Mao Tse-tung se hicieron con el control.

- Al mirar a los ingleses que me rodeaban resultaba imposible creer que hubieran ganado la guerra… hablaban como si hubieran ganado la guerra, pero actuaban como si la hubieran perdido. Era evidente que estaban agotados por la guerra y que esperan poco del futuro.

- La esperanza también se racionaba, y la gente tenía la moral baja.

- Me di cuenta muy rápidamente de que la Inglaterra en cuya creencia me habían educado era una fantasía total. La clase media inglesa había perdido la seguridad. Incluso las personas relativamente adineradas, como los amigos de mis padres  - doctores, abogados, directores generales-, llevaban un estilo de vida muy modesto, con casas grandes pero poco calientes y una dieta insulsa muy escasa. Pocos viajaban al extranjero, y la mayoría de los privilegios de los que gozaban antes de la guerra, como los criados y un nivel de vida acomodado que les había otorgado por derecho, se veían ahora amenazados.



- ¿Deberíamos haber ido a la guerra en 1939, teniendo en cuenta lo mal preparados que estábamos y lo poco que hicimos para auxiliar a Polonia, a la que Neville Chamberlain nos había obligado a ayudar al declarar la guerra a Alemania? Pese a todos nuestros esfuerzos, la pérdida de muchas vidas audaces y la destrucción de nuestras ciudades, Polonia fue rápidamente invadida por los alemanes y se convirtió en el escenario de la mayor carnicería de la historia. ¿Deberían haber esperado unos años Gran Bretaña y Francia hasta que los rusos hubieran sufrido la peor parte del poder militar alemán? Y, lo que es más importante desde mi punto de vista, ¿deberían haber atacado Pearl Harbor los japoneses si hubieran sabido que no solo se enfrentaban a los ejércitos, la armada y las fuerzas aéreas estadounidenses, sino también a los de Francia, Gran Bretaña y Holanda? La imagen de las tres potencias coloniales derrotadas o eliminadas por los alemanes habría inclinado la balanza en los cálculos de los japoneses. 

- ¿Pagaron los ingleses un terrible precio por el sistema de autoengaños en el que se sustentaron casi todos los aspectos de sus vidas?

- Actualmente la ciencia ficción es el único rincón en el que sobrevive el futuro, del mismo modo que los dramas de época televisivos son el único rincón en el que sobrevive el pasado. 

- Tal vez yo pertenezca a la primera generación para la cual la salud y la felicidad de sus familias es un indicador significativo de su bienestar mental. La familia y todas las emociones que alberga son un modo de poner a prueba las mejores cualidades de una persona, un trampolín en el que uno puede saltar cada vez más alto, cogido de la mano de su mujer y sus hijos.

- Los sesenta fueron una época mucho más revolucionaria de lo que los más jóvenes comprenden actualmente, y la mayoría se imagina que la vida en Inglaterra siempre ha sido muy parecida a la de hoy día, salvo por los teléfonos móviles, los correos electrónicos y los ordenadores. Pero entonces tuvo lugar una revolución social, tan importante en muchos aspectos como la del gobierno laborista de la posguerra. La música pop y la era espacial, las drogas y Vietnam, la moda y el consumismo se confundieron en una mezcla estimulante y volátil. 

- Uno de los principales motores  de cambios en los sesenta fue el uso totalmente informal de las drogas, una cultura generacional por derecho propio. Muchas drogas, encabezadas por el cannabis y las anfetaminas, eran de tipo recreativo, pero otras, principalmente la heroína, estaban destinadas a su uso en unidades de cuidados intensivos y pabellones de cáncer terminal y eran muy peligrosas. El tema generó un gran escándalo moral, mientras se hacían reivindicaciones absurdas por la transformación de la imaginación inducida por el LSD. La generación de los padres luchaba tras una barricada de gin-tonics, mientras los jóvenes proclaman que el alcohol era el verdadero enemigo del futuro. 

- Constituye un ejemplo de la fusión de ciencia y pornografía que La exhibición de las atrocidades pronosticaba para el futuro próximo. Muchos de los “experimentos” imaginarios descritos en el libo, en el que grupos de amas de casa voluntarias son expuestas al visionado de horas de películas pornográficas y luego sometidas a pruebas para comprobar sus reacciones (!), se han llevado a cabo desde entonces en institutos de investigación de Estados Unidos.





El mito de la guerra buena - EE.UU. en la Segunda Guerra Mundial Jacques R. Pauwels

EL MITO DE LA GUERRA BUENA
EE.UU. en la Segunda Guerra Mundial
Jacques R. Pauwels



- Deseo aclarar que no se aleja del enfoque tradicional en un intento de convencer al lector de que Hitler no fue realmente tan terrible o de que el nacionalsocialismo tenía sus lados positivos, como es el caso de algunos recientes tratados sobre la época, Esta síntesis se basa en la irrefutable premisa histórica de que Hitler y sus secuaces nazis fueron desmedidos criminales y el nazismo un sistema despiadado basado en una ideología inhumana y despreciable.

- En este libro, por tanto, la Segunda Guerra Mundial no se presenta como la “Guerra Buena”, como la cruzada americana contra el fascismo y el militarismo, sino como un conflicto de intereses , donde los negocios, el dinero y los beneficios fueron lo verdaderamente importante. 

- La política de EE.UU. durante la guerra no puede explicarse en función de los motivos, objetivos y pensamiento del presidente Roosevelt, como usualmente hacen muchos historiadores que todavía suscriben con fe la antigua teoría de que los llamados “grandes hombres” determinan el curso de la historia. 

- Es la historia quien determina cuales son los grandes hombres y no al revés. 

- El auténtico centro neurálgico de esta Elite del Poder se encuentra en las gigantescas corporaciones americanas, tales como la Ford, General Motors e ITT, nombres que lo dirigen todo en el mundo pero especialmente en América. 

- No hay país en el mundo en el que los negocios tengan tanta influencia en el gobierno como en EE.UU. y ningún otro gobierno ha ido tan lejos en sus esfuerzos por favorecer la libertad de las empresas y el capitalismo sin trabas. 

- A EE.UU. se le sirve mejor siendo crítico y realista respecto a su historia reciente que defendiendo motor e ilusiones.

- A veces se piensa que la Unión Soviética sólo logró sobrevivir a los tanques nazis gracias a la ayuda americana, pero esto es extremadamente dudoso. 

- El gobierno americano los mandos militares sabían muy bien que debido a  esa nota habría riesgo de guerra, pero fingieron sorprenderse ante el repentino ataque a su base naval de Pearl Harbor, cerca de Honolulu, el domingo 7 de diciembre de 1941. El pueblo americano se conmocionó con una acción que no podían saber que era provocada en cierto modo por su propio imperio. 

- “No fueron los ataques de Hitler a los judíos lo que llevó a Estados Unidos a entrar en la Segunda Guerra Mundial… Lo que les hizo participar plenamente en la guerra fue el ataque japonés sobre la base naval de Pearl Harbor… Fue el ataque japonés a un enclave del Imperio Americano en el Pacífico”. (Howard Zinn)

- Y Noam Chomsky apunta que Oahu, la isla donde está situada Pearl Harbor, había sido tomada a los hawaianos (junto con el resto de sus antes idílicas y ahora totalmente comercializadas islas), medio siglo antes “por medio de la violencia y el subterfugio”. 

- Es común y frecuente que la mayoría de los textos de historia de la guerra prefieran limitarse a contar las batallas que se libraron en lejanos lugares al otro lado de los océanos Atlántico y Pacífico. 

- El termómetro del Dow Jones tiende a subir cuando el nivel de desempleo aumenta, porque esto último es más ventajoso para los negocios. (Un razonamiento que se cita con frecuencia es que el empleo creciente crea presión para elevar los salarios. Algo que se supone que es perjudicial para “la economía” porque es “inflacionario”; por otro lado los elevados beneficios nunca se perciben como “inflacionarios”). A la vista de esto puede comprenderse que el gobierno americano, cuya primera raison d’etre es defender los intereses de los empresarios, haga que apoya el pleno empleo como un ideal teórico, pero nunca apoye este ideal como política práctica. 

- La Elite del Poder aprendió otra lección trascendental:  que la huelga y otras acciones colectivas constituían el arma más efectiva disponible para los trabajadores. Precisamente por esto las películas de Hollywood sugieren una y otra vez que los problemas se resuelven mejor mediante heroicas acciones individuales, en contraste con la supuesta apatía e ineficacia de las masas; en las llamadas “películas de acción” todo se centra siempre en acciones individuales, nunca en acciones colectivas. De esta forma se busca ir minando, entre los que podrían beneficiarse de ello, el interés y la confianza en las acciones colectivas, que causaron fuertes dolores de cabeza a la Elite del Poder durante la guerra. 

- Nació en América la imagen del nazi como un malhechor, un villano, una caricatura; una imagen que ha sobrevivido hasta nuestros días en producciones de Hollywood del tipo de Indiana Jones. Sin embargo, esta campaña de propaganda tan simplista, no contribuyó absolutamente nada al genuino entendimiento del complejo fenómeno social europeo que fue el fascismo en general y el nazismo alemán en particular.

- El programa de bombardeos estratégicos supuso el empleo de una enorme cantidad de recursos humanos y materiales, que previsiblemente podrían haberse utilizado de forma más eficiente para otros fines, por ejemplo para abrir el segundo frente en Europa Occidental. Además, la USAF y la RAF sufrieron grandes pérdidas en aviones y tripulaciones. Solo los americanos perdieron 40.000 hombres y 6.000 aviones. En un mes - julio de 1943 - la USAF, que bombardeó Alemania a la luz del día, perdió 100 aviones y 1.000 soldados. La situación mejoró hacia el final de 1943 con la introducción de los cazas P-51 Mustang, capaces de escoltar a los gigantescos bombarderos hasta muy dentro del espacio alemán. Aunque las espectaculares incursiones aéreas fueron un instrumento perfecto de propaganda, así como inspiración para posteriores películas, tales como Dambusters y La bella de Menphis, nunca produjeron los resultados esperados, como reconoció  el estudio oficial publicado en 1946 “Datos del Bombardeo Estratégico”. El bombardeo no era muy exacto, aunque los americanos hablaran de “bombardeo de precisión”, y no pudieron evitar el continuo incremento de la producción alemana, que no cesó hasta el final de 1944. Por lo que respecta a la población civil alemana, murieron a causa de los bombardeos 300.000 personas. Los bombardeos originaron el odio de los ciudadanos alemanes hacia los aliados, pero no les desmoralizaron, pues siguieron determinados a continuar hasta la “victoria final”, que Hitler y Goebbels seguían invocando de forma convincente. 

- Por cada americano que “dio su vida”, como suele decirse, no menos de 53 soldados soviéticos dieron la suya; mientras que un total de 600.000 británicos y americanos morían en todos los frentes, incluida la guerra contra Japón, mas de trece millones de soviéticos cayeron en el frente oriental.

- En Italia en general y en Sicilia en particular, los americanos también colaboraron íntimamente con la mafia, que percibían como “bastión anti-comunista”… Esta iniciativa siciliana inauguró una vergonzosa, íntima y larga cooperación de posguerra entre los servicios secretos americanos y el hampa internacional, sobre todo en el lucrativo campo del tráfico de drogas. 

- Los acontecimientos de los años 1943 y 1944 en países como Italia, Grecia y Francia, habían mostrado claramente que eran los libertadores los que decidían cómo los fascistas eran castigados o perdonados, cómo se restauraba la democracia, qué influencia se les permitía tener a los movimientos de resistencia antifascista y a la población en general en la reconstrucción de su propio país y si se introducían o no reformas económicas, políticas y sociales.

- El avance agloamericano hacia la capital alemana tuvo una intentona en Holanda con “Market Garden” y fue impedido de nuevo en diciembre de 1944/enero de 1945 por la inesperada contraofensiva de von Rundstedt en Las Ardenas. Este último episodio estaba destinado a entrar en la conciencia colectiva americana, y en sus libros de historia, como una gigantesca y heroica batalla, que por supuesto sería celebrada por una producción de Hollywood. En realidad, la confrontación de Las Ardenas supuso un serio revés para los americanos. Al final la contraofensiva de von Rundstedt fue un fracaso, pero inicialmente la presión alemana fue considerable. 

- Lo que no consideraron en ese momento ni en Washington ni Moscú fueron las objeciones no solo morales sino prácticas que se le podían poner al Plan Morgenthau. Por ejemplo, el plan era realmente incompatible con las expectativas de pago por parte de Alemania de elevadas reparaciones, las cuales presuponían cierta riqueza, que era imposible con la aplicación del Plan Morgenthau. 

- Los hombres de negocios se daban cuenta de que sería imposible hacer negocios rentables con una Alemania pobre. 

- Washington y Londres querian asegurarse de que Stalin era consciente del triunfo de su fuerza aérea. Y para demostrarle la clase de cosas que se podían hacer con la flota de Lancasters, Liberators y Fortalezas Volantes, la RAF y la USAF juntas decidieron bombardear la capital de Sajonia, Dresde… sobre el horizonte nocturno pudieron admirar las brillantes luces del infierno de Dresde, que fueron visibles a más de trescientos kilómetros de distancia. 

- “Lo que yo creo que ocurrió es que los rusos se estaban moviendo demasiado deprisa y los aliados decidieron demostrarles que, aunque teníamos un gran ejercito, también teníamos una tremenda fuerza aérea, así que no presumáis chicos, o veréis lo que podemos hacer con las ciudades rusas. Esto fue lo que pensaron Roosevelt y el resto. Fue una atrocidad calculada, no tengo ninguna duda”. (Un miembro de los bombarderos que participó en la incursión sobre Dresde)

- El bombardeo de la capital de Sajonia no tuvo nada que ver con la guerra contra la Alemania nazi, una guerra que en aquel momento estaba prácticamente acabada. 

- La idea de que los soviéticos estaban dispuestos a invadir Europa en 1945 o es mas que un cuento de hadas, una de las muchas fábulas de la abundante mitología de la Guerra Fría.

- La captura de la capital alemana costó al Ejercito Rojo no menos de 100.000 hombres. Este precio fue casi tan alto como las pérdidas totales americanas en Europa durante toda la Segunda Guerra Mundial.


- Que uno de los más grandes dramas de la historia del mundo tuviera tan confuso e indigno final en Europa fue consecuencia, como dice Gabriel Kolko, de la forma en que durante los últimos días de guerra los americanos y británicos quisieron conseguir toda clase de grandes y pequeñas ventajas, relegando a los soviéticos, en los detalles de la inevitable capitulación alemana. 

- Truman no usó la bomba atómica para forzar a Japón a ponerse de rodillas, sino por otras razones. 

- Truman declaró hipócritamente en aquellos momentos que las dos bombas nucleares fueron para “traer a los chicos a casa”, es decir para terminar rápidamente la guerra, sin más pérdida de vidas americanas. Esta explicación fue propagada por todos los medios americanos, dando lugar a un mito desarrollado por la mayoría de historiadores americanos, que todavía es creído en el día de hoy. 

- Un ataque de miles de bombardeos sobre la capital japonesa el 9 y 10 de Marzo de 1945, originó el mismo número de víctimas que las de Hiroshima. 

- Sin la diplomacia nuclear de Truman, Europa nunca hubiera estado dividida por el “telón de acero”.

- Cada vez era más difícil para los soviéticos construir con éxito su sociedad socialista y debido a esta carrera todo hacía pensar que el proyecto terminaría fracasando, lo cual ocurrió finalmente, aunque la Elite del Poder americana tuvo que esperar casi cincuenta años para saborear su triunfo. 


- Si Washington se vio envuelto en la guerra contra la Alemania nazi (y contra la Italia fascista) fue porque el apoyo al enemigo de Alemania, Gran Bretaña, abría más perspectivas de negocios rentables, sin dañar la lucrativa conexión alemana. 

- Se presentó a los nazis como sádicos, gangsters, criminales y aventureros sedientos de sangre cuya llegada al poder en Alemania  había sido una trágica pero misteriosa peculiaridad de la historia; los nazis en otras palabras eran sabandijas que había que exterminar. 

- Durante las últimas semanas de las hostilidades los americanos habían ocupado una parte considerable de la zona soviética, Turingia y gran parte de Sajonia. Cuando la abandonaron, en junio de 1945, se llevaron al oeste mas de diez mil vagones de ferrocarril llenos del mejor y más nuevo material, patentes, etc. de la empresa Carl Zeiss de Jena y de las factorías locales de empresas como Siemens, Telefunken, BMW, Krupp, Junkers e IG-Fargen. Este botín incluyó el saqueo  de las factorías  nazis de las V-2 en Nordhausen, no sólo los cohetes sino documentos técnicos por un valor aproximado de 400 a 500 millones de dólares, así como unos 1.200 expertos alemanes en la tecnología de los cohetes, una de las cuales era el famoso Wernher von Braun. Finalmente los americanos también rapiñaron una considerable cantidad de oro, una parte relativamente pequeña pero importante del llamado Totengold der Juden, el oro robado a los judíos por parte de las SS que no había podido trasladarse a Suiza antes del final de la guerra. Este tesoro lo descubrieron los soldados americanos en una mina de sal en la ciudad de Merkers, en Turingia, y en el campo de concentración de Buchenwald. Está claro que estos traslados de tecnología, y toda clase de material valioso, incrementaron la ya considerable asimetría entre la zonas de ocupación alemanas. 

- Una Alemania dividida era más ventajosa para Washington.




Diario, Vaslav Nijinsky

DIARIO, Vaslav Nijinsky

Ediciones El Acantilado. 


- Yo he dicho muchas veces que comer carne es malo. No me comprenden. Piensan que la carne es algo imprescindible.

- La gente piensa que me voy a volver loco, pues piensan que voy a perder la chaveta. El que perdió la chaveta fue Nietzsche, pues pensaba. Yo no pienso y por eso no voy a perder la chaveta. 

- Las medicinas no sirven para nada. Las medicinas son dinero. El dinero no ayuda a la vida, sino que la complica. 

- A los españoles les gusta la sangre del toro, y por eso les gustan las matanzas. Los españoles son gente horrible, pues se dedican a la matanza de toros. La iglesia, con el Papa a la cabeza, no puede detener las matanzas de toros. Los españoles piensan que el toro es una fiera. El torero llora antes de matar al toro. El torero cobra mucho, pero no le gusta ese oficio.

- La fotografía estropea un ojo y la letra impresa muchos ojos.

- Mi estomago está limpio. No me gusta comer carne. Vi cómo mataban a un cordero y a un cerdo. 

- Amo a los animales y por eso me daba pena comer carne, pues sé que si como carne habría que matar a otro animal.

- El medicamento proporciona ayuda, pero si lo bebes todo te vas al otro mundo.

- Considero que no hay que conservar los cuadros de los muertos, pues arruinan la vida de los artistas jóvenes. 




La Cripta de Franco, Jeremy Treglown

La Cripta de Franco, Jeremy Treglown
Editorial Ariel.

- Desde hace varios años España busca a sus desaparecidos. Están en todas partes, en todas las comunidades autónomas, en todo tipo de terrenos. En muchos casos son los nietos, los bisnietos, los que han instado a las familias a manifestar lo que sospechan, o saben, o vieron, y han guardado para sí durante décadas. La política ha tenido mucho que ver. Según una ley aprobada en 2007, cuando e PSOE estaba en el poder, cualquiera que aporte pruebas razonables de la existencia de una fosa común tiene derecho a ayudar a excavarla. Los puntos que marcan en el mapa los emplazamientos probables, entre el País Vasco y Andalucía, Castilla-León y Valencia, dan a la península el aspecto de la cara de un niño con varicela.

- El rey abdicó y en 1931 se instaló un gobierno elegido democráticamente: el primero en España. Este gobierno se ganó la lealtad de los trabajadores y los intelectuales liberales, pero estaba debilitado por disensiones internas, por cuestionamientos sobre la legitimidad del proceso electoral, por la aparente imposibilidad de resolver las dificultades económicas  del país y por el extremismo de una izquierda que alentó a su equivalente de la derecha.

- El levantamiento militar -que se proclamó justificado por la manifiesta incapacidad del gobierno para proteger a sectores de su propia gente, especialmente dentro de la Iglesia- contó con el apoyo de la mayoría de la desproporcionada cantidad de oficiales del ejército y de las clases medias y altas, de casi todos los obispos, aún poderosos, y de la gran mayoría de la población campesina católica de Castilla la Vieja y Galicia.

- Con frecuencia llamada el ensayo general de la segunda guerra mundial, en realidad la guerra civil española puede muy bien considerarse su primer acto.

- Si se dejan de lado los ocho siglos de dominación islámica de parte de España, entre el 711 y el 1492 -periodo más largo que el transcurrido desde que finalizó esa dominación hasta ahora- y se ignoran las posteriores expulsiones de musulmanes y judíos y la feroz expansión española en América, España aún parece diferente. ¿Será porque la segunda guerra mundial la ganó el bando equivocado? ¿El impacto cultural de la dictadura fue tan fuerte como el del nazismo?

- Mucho después de la muerte de Hitler y Mussolini, el régimen que ellos ayudaron a establecer en España siguió adelante. Cada persona que esté aproximadamente entre los cuarenta y tantos y los setenta y tantos y que haya nacido en España, nació durante el régimen de Franco, la mayoría fueron a la escuela en esa época y prácticamente todos los hombres que tienen más de sesenta sirvieron en las fuerzas armadas. Los edificios y las infraestructuras son asimismo parte de su legado: él mismo supervisó personalmente la creación de la monstruosa cripta donde ahora está enterrado a la cabeza de muchos de sus soldados, con el parque conmemorativo que la rodea llamado el Valle de los Caídos, y otros edificios públicos grandiosos, así como inmensos bloques de apartamentos municipales que construyeron en las décadas de 1950 y 1960, se deben a él. También se le debe, aunque de forma más indirecta, el que sobreviva tanto de la antigua arquitectura urbana: aunque durante la guerra civil bombardearon y cañonearon algunas partes de España, la neutralidad del país entre 1939 y 1945 lo salvó de la destrucción que sufrieron otros países europeos. Mientras tanto, el agua que riega los campos y sale de los grifos de tu hotel es, nos guste o no, el resultado del programa de construcción de presas del dictador; la electricidad que alumbra las calles lo es de sus planificaciones hidroeléctricas. Y también existe un legado artístico: pinturas, novelas, películas. 

- Cualquier obra realizada por personas que se habían quedado en España se consideró sospechosa, y casi fue imposible de encontrar en otros países. En realidad, hasta la muerte de Franco existió un gobierno republicano en el exilio, con base en México y ampliamente reconocido como el gobierno legítimo de España. Mario Vargas Llosa confesó que cuando era joven, en la década de 1950 en Perú, no leía  ningún escritor español contemporáneo que viviera en la Península Ibérica “por un prejuicio tan extendido por la América Latina de aquellos años como injusto: que todo lo publicado allá rezumaba ñoñez, sacristía y franquismo”.

- Al tratar de identificar qué tiene España de especial, descubrí enseguida que mucho tiene que ver con una obsesión por la “memoria” que está políticamente manipulada y es culturalmente amnésica. 

- Hoy, pese a las diversas dificultades sociales y económicas que comparte con la mayor parte de sus aún privilegiadas comunidades, España está gobernada por una democracia parlamentaria razonablemente segura y sensible. 

- Su sistema propio surgió en las décadas de 1970 y 1980 de la decisión de que las cosas no debían ser como habían sido durante las tres décadas y media pasadas. La dictadura misma había sido una reacción contra organizaciones anteriores y tuvo algunas consecuencias positivas. Las encuestas de opinión indican un importante nivel de aprobación, en lento descenso, del régimen de Franco. Esto se ve más entre los mayores que entre los jóvenes, si bien las anécdotas de algunos padres de adolescentes apuntan a que posible que José Antonio Primo de Rivera estaría comenzando a atraer de una forma nueva a los jóvenes, pero la democracia consiste en respetar las opiniones de la gente independientemente de su edad, por lo que el argumento de que la generación mayor se educó bajo Franco, aun cuando es cierto, queda compensado por el hecho de que los jóvenes se educaron después de su muerte, en 1975, un punto de inflexión de cuyas implicaciones sus padres y sus abuelos también han tenido tiempo, casi cuarenta años, para acostumbrarse. 

- Entre los más notorios defensores de la reciente racha de exhumaciones está el biógrafo de Lorca, Ian Gibson, cuyo primer libro, publicado estando Franco aún en el poder, es el relato del asesinato del poeta. 

- La actitud de los españoles con respecto a la muerte siempre ha sido una extraña mezcla de reverencia y tranquilidad. 

- La Ley de la Memoria Histórica de 2007 que, entre otras ocas, les exige apoyar las excavaciones y las investigaciones en los archivos y, salvo en casos de valor arquitectónico o histórico especial, quitar los recordatorios de la dictadura de Franco. Algunas de las solicitudes de Garzón eran quijotescas. Por ejemplo, anunció, en nombre de una cantidad de familias, que necesitaba, en un plazo de dos semanas, las listas completas de nombres de las bajas de la guerra civil. Pese a que los historiadores del siglo XX les encantó ver cómo se presionaba a los archivistas para que encontrasen y entregasen los registros documentales, también señalaron que la cantidad de material es enorme. 

- Los opositores legales de Garzón afirmaron con éxito que la ley de la memoria de 2007 otorga la responsabilidad a las autoridades locales y no a las centrales -la España democrática tiene un aparato administrativo muy descentralizado-, y que se había excedido en sus funciones. Como nunca renunciaba a los grandes gestos, Garzón insistió. Uno de sus argumentos era que toda persona que hubiese participado en el régimen de Franco y viviese aún debía ser juzgado por crímenes contra la humanidad. Al recordársele que el gobierno español elegido democráticamente en 1977 había aprobado una ley de amnistía, replicó que ninguna amnistía puede pisotear los derechos humanos. Mientras tanto, continuó presionando para que se hiciera algo con los descubrimientos de los historiadores que habían demostrado tanto que los psicólogos militares franquista experimentaban con presos republicanos en la esperanza de identificar los “genes rojos”, como que miles de niños hijos de mujeres republicanas, incluidos los nacidos en la cárcel, fueron entregados a parejas franquista o a órdenes religiosas con nuevas identidades. Muchos de estos adoptados a la fuerza siguen vivos y algunos de ellos han descubierto hace muy poco quiénes eran sus padres biológicos.

- La ley es un instrumento más romo que la historia. La defensa de Garzón, que incluía entre sus causas la apertura de la tumba de Lorca, , muchas veces daba la sensación de ser estridente en comparación con el trabajo minucioso de los historiadores que le nutrían de argumentos. Uno de los sobrinos de Lorca se quejó: “No necesitamos un juez para que venga y nos diga que Franco fue un asesino”. 

- Cuando aún no tenía cuarenta años, Garzón se relacionó estrechamente con el PSOE y durante algún tiempo estuvo a cargo de la campaña contra las drogas del partido. Cuando volvió al poder en 2004, el PSOE encabezado por José Luis Rodríguez Zapatero inmediatamente comenzó a pelear por la aprobación de la su Ley de Memoria Histórica, con el efecto, probablemente intencionado, de inducir a las figuras clave del Partido Popular a oponerse a ella. Al caer en esta trampa el líder del PP, Mariano Rajoy, permitió que su partido se considerase no solo defensor sino el heredero natural del franquismo, y el PSOE, por contraste, como una versión idealizada del movimiento republicano renovado (Zapatero mismo hablaba con frecuencia de uno de sus abuelos, a quien habían matado los franquistas, pero no del otro, que los apoyaba). Al principio era poca la gente que acusaba a Garzón de puro partidismo: en el PSOE, como en otros sitios, había sido implacable descubridor de corrupciones. Pero la campaña con la que se le relacionaba comenzó a tener oposición, que quedó reforzada por el regreso al poder del PP a finales 2011. En una cantidad de ayuntamientos en los que había gobernado el PSOE pero ahora había reemplazado el PP, monumentos nuevos dedicados a la República se “re-dedicaron” oficialmente. Por ejemplo en Elche, al sudeste, un parque público de fines de la década de 1990 que llevaba el nombre de la heroína republicana Dolores Ibárruri, “La Pasionaria”, pasó a llamarse Jardines de la República Argentina, y la Avenida del Ferrocarril, de nombre más que soso, se renombró provocativamente en homenaje a uno de los últimos alcaldes franquistas, Vicente Quiles, que había inaugurado una nueva línea de ferrocarril subterráneo. Mientras tanto, fuera cual fuese la legitimidad de sus esfuerzos relativos a la ley de la memoria, el propio Garzón fue acusado de excederse en otro caso, en que había dado instrucciones a la policía de que grabara en secreto las conversaciones entre los encausados y sus abogados, y se le echó de la judicatura. 

- Quizá hoy se ridiculice el pragmático “pacto del olvido” de las primeras épocas del posfranquismo,  pero tuvo un objetivo crucial.

- “Cualquiera que afirme que solo ahora es posible publicar novelas o libros de historia que cuenten la verdad acerca de la guerra civil y la dictadura haría mejor en decir que no ha leído los que escribieron antes, o que no se molestan en leerlos, porque ya no están de moda… En los diarios y en la televisión ves fotos de personas demasiado jóvenes para recordar la guerra civil, que lloran porque algunos esqueletos tienen las manos atadas. ¡Por supuesto que les ataron las manos!” (Antonio Muñoz Molina)

- La generación mayor tiene, de todas las maneras posibles, una comprensión más justa, más compleja, de aquella época que las personas más jóvenes. 

- Cuando España aprobó su ley de la memoria, ya se enfrentaba al aumento del desempleo más inquietante de Europa. Hoy más que nunca desenterrar el pasado puede parecer la nueva versión de esconder la cabeza en la arena. 

- Se cree que en total se mató a unos 6.800 religiosos entre curas, monjes y monjas, más que durante la Revolución francesa. 

- Franco sentó las bases de la relativa prosperidad de que gozaron los últimos años de su régimen y que continuó durante los veinticinco años finales del siglo XX. 

- Hacia 1970, la población había aumentado hasta el 37%. En ese mismo periodo, la población de Madrid se triplicó y creó lo que no mucho después Raymond Carr y Juan Pablo Fusi describieron como “un caso de urbanización único en Europa, una metrópolis que ha drenado las provincias circundantes y creado un desierto demográfico”.

- Es más fácil emprender grandes obras públicas bajo gobiernos autoritarios que bajo aquellos en los que la norma es la consulta popular. 

- Durante el régimen de Franco, mientras las población del país aumentó en un 40%, la construcción de presas se duplicó y la capacidad de almacenamiento de agua creció seis veces. Tanto se identificaba al Generalísimo con esas obras que su oponentes adaptaron una popular canción colombiana de entonces, “Se va el caimán”, para que refiriese a Franco “Se va el caimán, se va el caimán - se va para Barranquilla” y se cambiaba el nombre de la localidad por la del pantano al que se estaban refiriendo. 

- “Central eléctrica” es una de muchas obras que contradicen la idea, aún muy extendida, de que la censura franquista evitaba cualquier forma de oposición intelectual o creativa. 

- El tema es durante cuánto tiempo se ha de hurgar en la herida.

- La columnata de la abadía y la cruz visible desde Madrid, sin duda es la más imponente pieza fascista de arte y arquitectura paisajísticas que sigue en uso en el mundo.

- Las estatuas griegas, las pinturas del Renacimiento italiano, los fetiches africanos que una vez tuvieron poderes religiosos… ¿de quién son y dónde y cómo habría que cuidarlos? También han ido cambiando las ideas acerca de los museos mismos, de lo que hacen y para quién lo hacen. En todo esto participan inquietudes pedagógicas y también los movimientos de las artes visuales. Las nuevas tecnologías  desempeñan un papel capital junto con la aparición de lo que los sociólogos llaman “hipersegmentación” o enfoque sobre grupos y zonas cada vez más pequeños, todo lo cual facilita internet. Todas estas tendencias se pueden ver en los nuevos museos cuyo propósito es conmemorar, informar y, en algunos casos, recrear aspectos de la “experiencia de” la guerra civil española, sitios que en su misma naturaleza reflejan las culturas locales de las que ha surgido. 

- Si bien es cierto que Franco dependía mucho del apoyo aéreo italiano y alemán, lo mismo le ocurría al gobierno republicano con respecto a la aviación de la Unión Soviética. De la manera en que se hace hincapié en los ataques ítalo-alemanes sobre Cartagena, se corre el riesgo de que se piense que España era atacada por potencias extranjeras y no víctima de una guerra civil. 

- Al menos en Almería los dos bandos tienen sus monumentos. En otras ciudades españolas, las divisiones locales han causado una suerte de parálisis conmemorativa. Una de las zonas por las que se peleó con más fiereza fue Teruel, al este de Madrid, ciudad en manos de unas fuerzas nacionales al principio débiles contra las que los republicanos desataron una ofensiva en el invierno de 1937. El objetivo era desviar el ataque que se preveía contra la capital. Al principio se logró , pero la cantidad de refuerzos nacionales, junto con luchas internas entre los líderes militares republicanos causaron la recaptura de la ciudad un par de meses más tarde. Las bajas de los dos bandos durante  la breve pero salvaje campaña militar ascendieron a más de cien mil. Pero los que visitan la ciudad no se enteran de nada de esto. 

- Suele ser frecuente en España que los lugares más poderosamente representativos de los ocurrido sean aquellos sobre los que no se llama la atención.

- Después de morir Franco en 1975, la familia renunció a El Pardo y cuando también murió su viuda, vendieron la casa de Torrelodones por unos muy convenientes 300 millones de pesetas. Pero se les quitó nada. Gran parte de éxito de la Transición dependió de una combinación de realpolitik y la admirable decisión de no reproducir el triunfalismo reivindicativo que había caracterizado la victoria del Caudillo. En medio de un mayoritario (aunque lejos de unánime) deseo de olvidar aunque no de perdonas, muchas personas que habían servido al régimen anterior, desde políticos nacionales y locales hasta soldados y policías, permanecieron en sus sitios. Por lo que respecta al Pazo de Meirás, esto significó que hasta hace muy poco la familia gozó del apoyo, por un lado, del alcalde de la localidad -que por fortuna también era su farmacéutico-, y por otro, de una figura más poderosa aún, Manuel Fraga, arquitecto del boom turístico español en tiempos de Franco, uno de los padres de la Constitución de 1978 y fundador del conservador Partido Popular en sus modalidades actual y anterior. Por un feliz golpe de la fortuna, Fraga llegó a presidente de la comunidad gallega en 1990, cuando ya era casi octogenario. 

- Pese a los ataques del régimen al pintor, había una docena de obras de Picasso en el Museo de Arte Contemporáneo. 

- Artistas extranjeros que se habían afincado en la España de Franco: el rumano Pic Adrian en Barcelona, el estadounidense Mil Lubroth en Madrid, el alemán Will Faber en Ibiza, la francesa Liliane Ranceze en Gijón. 

- Eduardo Chillida, Antoni Tàpies, Manolo Millares y Antonio Saura. Todos gozan de celebridad internacional y todos vivieron y trabajaron en la España de Franco.

- En realidad lo artistas jóvenes tuvieron muchas oportunidades en la España de Franco, a pesar de haberse considerado que la cultura oficial era uniformemente tradicionalista y represora. A muchos se les dio la oportunidad de estudiar en París con becas francesas y gozando del apoyo de una numerosa comunidad artística española. Tàpies se benefició de ambas cosas y antes de los 30 años su obra se exhibía no solo en Barcelona y París, sino en la Bienal de Venecia, el Instituto Carnegie de Pittsburgh y en galerías comerciales de Chicago y Nueva York. 

- España era uno de los países de Europa con mayor número de artistas reconocidos internacionalmente y que participaban de los principales movimientos contemporáneos. Además, mientras durante el siglo XIX todos los pintores de talento tenían que emigrar, en el período de Franco volvían a vivir en la península. Este rumbo inesperado de los acontecimientos ¿sucedió a causa del régimen o a pesar de él?… La respuesta a esta pregunta es: ni lo uno ni lo otro. No son los gobiernos los que producen el arte, sino los artistas.

- En una de las bienales nacionales en España, un grupo de funcionarios nerviosos acompañaban a Franco mientras miraba algunos cuadros de Tàpies. “Esta es la sala de los revolucionarios, excelencia”, se cuenta que le explicó uno de ellos. Franco respondió alegremente “Mientras la revolución que hacen no sea más que esta…”. 

- Lo que está claro es que la idea de que la España de Franco fue un desierto por lo que se refiere al arte está muy lejos de ser verdad.

- Cuando miramos hacía atrás, nuestra vista siempre aplana el paisaje. En aquella época, cuando las personas inteligentes de España miraban había delante, veían la rica variedad que esperaban de un futuro posfranquista. Pero en las décadas de 1950 y 1960 España ya estaba viviendo ese futuro… la cultura española comenzó a ser posfranquista mucho antes del fin de la dictadura. 

- La pregunta antigua, pero que sigue ahí, es si alguna vez los artistas son políticos en el sentido serio de la palabra, por no hablar de poderosos. En el caso de la España demasiados del siglo XX, los ejemplos más frecuentes son Picasso, Miró y Dalí. Se ha escrito mucho sobre los tres, pero los puntos más importantes se pueden resumir sencillamente. Pese a que la izquierda se apropió del surrealismo, Dalí se negó a condenar al fascismo y le satisfacía vivir en la España de Franco. Durante la guerra civil, mientras residía en Francia, Miró puso parte de su obra explícitamente al servicio del bando republicano, pero en 1940 regresó a España. 


- Picasso no estaba en Guernica cuando la ciudad fue bombardeada, sino a salvo en su estudio de París, trabajando en su proyecto, aún sin título, para el pabellón español de la Exposición Universal. 

- Se alaba la neutralidad de España en la segunda guerra mundial y no solo por haber posibilitado la huida de algunos judíos europeos por el país, pero nada se dice de cuando Franco trató de convencer a Hitler de que dejase a España tomar parte en la guerra en condiciones que Hitler rechazó, o acerca de sus habituales arrebatos antisemitas o, en realidad, sobre las rutas de escape (para no hablar de oportunidades de trabajo) que el país ofreció a muchos nazis que huían después de 1944.

- Y así sigue la historia, con Franco avanzando lenta pero firmemente hacia cualquier cosa buena (como la restauración de la monarquía) y alejándose de cualquier cosa mala (como el extremismo de derechas entre sus aliados). Nos enteramos de que alrededor de 1950 se reconoció internacionalmente la legitimidad del régimen y que los líderes mundiales le consideraron “un jefe de Estado fiable”.

- Franco “dio luz verde” a las negociaciones de España para formar parte del Mercado Común Europeo (maravillosa manera de darle vueltas al hecho de que la CEE le había dado luz roja a España), estuvo de acuerdo con las reformas económicas liberales que hacia 1963 hicieron del país “el séptimo más próspero del mundo”. 

- El historiador de la cultura Luis Alegre Saz describe la “movida madrileña” liderada por Almodóvar como “fenómeno juguetón que surgió como reacción a la moralidad franquista” y da cuenta breve pero clara de los compromisos políticos del director, de los cuales no es el menos importante su ofensiva contra el gobierno de Aznar por enviar tropas españolas a Irak. 

- Pío Moa es un avezado propagandista, muy activo tanto en redes como editorialmente. Parte de su impacto se debe al ardid bien ensayado de presentarse como el personaje aislado que batalla contra el poder de las instituciones que lo excluyen de sus debates, postura semejante a la del historiador británico David Irving, aunque la similitud acaba aquí. Moa no niega lo peor de la dictadura. Si bien su libro más conocido exasperó a sus opositores con el título de “Franco: un balance histórico” (2005), su éxito tiene mucho que ver con el hecho de que, al sopesar los pros y los contras más extremos, lo que consigue y da es precisamente una hábil y casi histriónica impresión de equilibrio.

- Al guardar, que no olvidar, el pasado, los que fueron derrotados en la guerra civil evitaron “un ajuste de cuentas ignominioso” y desviaron la atención del hecho de que estaban restaurando, de formas mucho más prácticas, el sistema que se derrotó en 1939. Es como si hubieran leído a Max Weber y pensado, como él, que no hay nada más abyecto que pretender solo tener la razón. Javier Cercas condena sin atenuantes a aquello que “en vez de preocuparse con lo que le interesa al político, es decir el futuro y la responsabilidad hacia ese futuro, se preocupan por temas políticamente estériles de culpas pasadas”.

- La memoria es sintética, es un constructor formado a partir de toda una gama de informaciones mezclada con respuestas psicológicas -imaginativas-.

- La mitología popular ha exagerado el punto hasta el cual la dictadura controlaba lo que se escribía, no solo ella por sí sola sino en comparación con las libertades que, se suponía, disfrutaban otros países.

- Tampoco es que en esa misma época en Gran Bretaña y en Estados Unidos no existieran conflictos relacionados con la libertad de expresión.


- Hay que decir en defensa de Gironella, en primer lugar, que por la mejor literatura de su época, y también de la nuestra, transcurre una inacabable corriente de realismo social que sin duda es una de las características más sólidas de la literatura de guerra de mediados del siglo XX en general, ya sea española, estadounidense, inglesa, italiana o rusa.

- Los republicanos habían masacrado a alrededor de mil prisioneros nacionales cerca de Paracuellos del Jarana, atrocidad que aún sigue viva en la memoria de los conservadores españoles, aunque los del otro lado no la mencionan mucho.

- Los cineastas españoles eran más cosmopolitas que la mayoría de sus compatriotas, y sus conexiones con la industria italiana era especialmente liberadoras: una de las causas era la fuerza del comunismo en la Italia de posguerra. Hacía bastante tiempo que el realismo social, que en esta época solía ser difícil de distinguir el realismo socialista, formaba parte de las películas españolas y también de sus novelas y, pese a la censura franquista, recibía el aliento de sus conexiones italianas, particularmente después de 1951, año en que Madrid dedicó toda una semana a exhibir películas italianas de aquel momento.

- El control de la industria cinematográfica por el gobierno no fue iniciativa de los nacionales, y tampoco fue exclusivo de España.

- Se ha hablado mucho y bien, especialmente fuera de España, de la llamada “estética franquista”, gracias a la cual en las décadas de 1950 y 1960 se estrenaron varias películas excelentes y heterodoxas, pero desde nuestra perspectiva actual, los métodos que utilizaron -ironía, simbolismo y sobre todo ambigüedad- no son tan distintos de los que se encuentran en el repertorio cinematográfico de otras culturas con mucha menos censura. Por otra parte, pocas películas rodadas (o novelas escritas) incluso en regímenes democráticos son tan buenas, y muchas de las mejores se hicieron a pesar de todo tipo de dificultades, ya fueran políticas o económicas.

- Franco mismo manifestó astutamente que aunque Berlanga no era comunista, era algo peor: un mal español.

- No es necesario ser un dictador para considerar que la pornografía libre para todo el mundo no constituye un signo de civilización avanzada. Tampoco es, como ya hemos visto, que el cine español durante el mandato de Franco no haya podido hablar de las realidades sociales, políticas e históricas.

- Una de las maneras de explicar la Transición española es decir que comenzó con la muerte de Franco a finales de 1975 y terminó con el establecimiento de una nueva Constitución democrática en 1978. Pero el proceso fue más gradual: comenzó con diversos ajustes políticos ya en la década de 1950 y continuó hasta bien entrada la de 1980, e incluso la de 2010.

- Los éxitos del PP en las elecciones de 2011 hallaron su expresión a nivel local en una nueva oleada de cambios de nombres de calles, actividad que casi se ha convertido en el nuevo deporte nacional español. En el centro de Sevilla hay una calle que ha tenido tres nombres diferentes en menos de cuatro años.


J.G. Ballard, Para una autopsia de la vida cotidiana. Conversaciones

J.G. BALLARD, Para una autopsia de la vida cotidiana. Conversaciones.

Cabaret Voltaire.



Aquí el punk tenía - no sé si la comparación es adecuada - ese encanto que tienen las corridas de toros en España. Durante ciento cincuenta o doscientos años, sin duda en ese siglo, en España, las corridas de toros eran el único modo que tenía un chico de la clase obrera de pasárselo en grande con nada más que un poco de coraje. Pienso que la música punk o pop tiene algo de ese encanto. Si uno es un chico de clase obrera y no tiene nada -ni trabajo, ni capacitación, ninguna experiencia profesional o formación específica- lo mejor que puede hacer es comprar o robar una guitarra y armar una banda; es su única oportunidad, quizás, de hacerse rico.  O quizás puede utilizar la música pop para expresar su descontento, sus ambiciones o sus sueños. Entonces, aparecen estas cosas como la música oi. Las revistas de música, para las cuales solía escribir John Savage, prácticamente inventaron el oi, que es la música del Frente Nacional de los skinheads, tan políticamente explícita como Mein Kampf. El punk original fue muy político; un fuerte resentimiento político se expresaba en él. No sé cómo se hace en los Estados Unidos si uno es joven y tiene ganas de expresar su descontento. 

Si un escritor de ciencia ficción tuviera que hacer una predicción sobre el futuro, podría resumir mi temor en una sola palabra: aburrimiento. 

El futuro será un enorme y resignado suburbio del alma, nada nuevo va a surgir, ninguna evasión tendrá lugar otra vez.

Lo que espero de la revolución informática y de la televisión es que nos conduzcan a un canal de información científica, que solo tengamos que pulsar un botón para… Quisiera un rendimiento mucho más alto de la información que el que puedo adquirir por mi propia cuenta. ¡Quisiera estar informado acerca de cada cosa! En otras palabras, necesito conocer la lista exacta de pasajeros del DC-10 que se estrelló en las afueras de Málaga hace dos semanas. Necesito enterarme de las nuevas pinturas que está utilizando la General Motors para su gama Pontiac. Necesito conocer cada detalle, tener información precisa sobre todas las cosas. Quiero saber lo que desayuna Charles Mason, absolutamente todo. No es fácil tener acceso a toda esta información, este es el problema. (Nota, entrevista realizada en el año 1982, muy lejos aún de la aparición de Internet. Ballard se adelantó muchos años a la aparición de la Red.)

El futuro será como un suburbio en Düsseldorf, es decir: como en uno de esos barrios ultramodernos que tienen un BMW y un barco en cada unidad, el ideal de la clase media dirigente, con su mansión y su jardín. Suites inmaculadas -ni una colilla de cigarrillo en ninguna parte- con una moderna escuela inmaculada y un inmaculado centro comercial; un paraíso del consumo, sin una hoja fuera de su sitio -incluso una hoja suelta a la deriva podría parecer que tiene demasiada libertad. Resulta algo muy extraño y escalofriante: en apariencia, todo el mundo aspira a vivir del mismo modo en todas partes: en un suburbio de Nairobi, de Kyoto o de Bangkok. 

En un mundo perfectamente razonable, la única libertad posible es la locura.

Lo que me temo es que aquí, en Londres, dentro de diez o quince años o quince años, todo el mundo estará funcionando prácticamente como en la televisión. Todo el mundo tendrá un estilo de vida que ellos (los controladores de televisión) terminarán imponiendo a todo, incluso a los que viven en las afueras de Londres. La gente se inspira mucho en la televisión: su estilo de vida, la moda, la diversión, el tipo de amigos que uno tiene, el modo en que los elige, etc., han sido creados, en buena medida, por la televisión. Al menos, la gente que trabaja en la televisión sigue inspirándose bastante en una especie de mundo anárquico y antiguo, cualquiera sea: el adiestramiento de palomas, la cacería de osos o zorros. Pero todo eso terminará, y tendremos una nueva clase de ejecutivos jóvenes “de diseño” cuya idea de una experiencia intelectual interesante será jugar a los videojuegos desde los quince años.

Eso es algo que ya ha comenzado: se escriben libros nostálgicos sobre los videojuegos. Uno de ellos se publicó la semana pasada, su autor es el hijo de Kingsley Amis, Martin Amis; el libro trata enteramente sobre la adicción a los primeros videojuegos. Es una especie de kitsch más allá de la nostalgia kitsch, una nostalgia de hace cinco minutos, ¡por el amor de Dios! No sé cuánto hace que los videojuegos irrumpieron en los Estados Unidos, pero no ha pasado tanto tiempo. Estos primeros videojuegos como Space Invaders empiezan a ser discutidos lo mismo que si un montón de cinéticos discutieran sobre Casablanca. Pero al menos Casablanca significaba algo.

No sé si vieron ese vídeo temprano de David Bowie, Ashes to Ashes. Es como un fragmento de una película surrealista. Bowie aparece como un pierrot, un payaso, una de esas figuras de circo con collar de gorguera. Y hay una excavadora; suena terrible pero es asombroso. Debido a que únicamente por medio de la electrónica se puede teñir la pantalla con una luz rosa o azul, y luego recubrirla con alguna otra cosa, pudiendo elegir transformar todo en una especie de paisaje planetario, de pronto, todos esos árboles reales parecen árboles artificiales. Con solo presionar un botón, uno puede hacer cosas extraordinarias.

Está surgiendo una especie totalmente nueva de lenguaje, que no depende de la línea argumental en el viejo sentido, sino de una escala ascendente de sensaciones, casi como ocurre en la música, una abstracción total. Estoy seguro que es el porvenir. Todo el mundo será capaz de hacerlo, todo el mundo vivirá adentro de un estudio de televisión. Eso es a lo que aspira el ámbito doméstico en estos días: la casa va a transformarse en un estudio de televisión. Todos vamos a ser protagonistas de nuestras propias series, y serán series muy extrañas, como el interior de nuestras cabezas. Eso es lo que va a ocurrir, estoy completamente seguro y va a revolucionar todo.

Fui a un internado y me prometí, al terminar, que si tenía hijos jamás los mandaría a un internado, y nunca lo hice. Es una institución sombría, realmente, con una suerte de homosexualidad institucionalizada y obligada para los adolescentes, que exige mantener en el armario a la heterosexualidad durante veinte años.

La gente se queda en casa y mira la televisión… Y si tiene una televisión “de primera clase” como en Inglaterra, no le hará falta ir al cine ni leer un libro nunca más. Es la muerte de la cultura. ¡Quiero que en este país la televisión sea peor!

Con los recursos del vídeo, te puedes construir una biblioteca de imágenes bastante amplia, grabándolas desde tu propio televisor:: noticiarios, material documental de todo tipo, particularmente documentales de medicina con alta precisión en el trabajo de las cámaras, que e muestran cirugías a corazón abierto, cirugías del cerebro, o lo que sea. Puedes archivar todas esas imágenes y luego utilizarlas con distintos efectos, en un collage o en un montaje. No obstante, me pregunto si -como ocurre con la pornografía- uno no termina por cansarse de toda esa sobrecarga de imágenes, y a la larga tiene que regresar a algo más sencillo como una serie televisiva…

Uno debe volverse un hombre obsesivo, alguien que coleccione -por dar un ejemplo- material de archivo sobre zapatos de mujeres.

Uno podría terminar en una suerte de reino totalmente desapegado, donde ya no sería posible discernir nada. Uno debe cuidarse mucho de aplastar la propia sensibilidad, que es lo que ocurre con la gente que trabaja en los laboratorios experimentando con animales.

Ha habido algunas manifestaciones en contra de la vivisección, que se continúan hasta el presente, con partidarios de la liberación animal irrumpido en los laboratorios para rescatar a los animales, muchos de ellos encadenados a los electrodos y al suero… La otra noche, una chica en la televisión comentaba su experiencia en el trabajo con animales; decía que lo que más le horrorizaba era el hecho de que ella advertía que se estaba volviendo dura o indiferente hacia los sentimientos de los animales, y de que eso era algo inevitable. Si uno manual un mono sobre una mesa de operaciones para hacerle algún tipo de intervención, después de un rato ¡terminas por darle un maldito porrazo! Eso es lo que pasa, después de un rato ya no percibes nada, la situación te embrutece, te anestesia y te impide cualquier tipo de respuesta.


Si vas al sur de Francia, a Grecia o España, verás un pelotón de mujeres maduras haciendo topless delante de sus hijos adolescentes, que andan también desnudos de la cintura para abajo. Pero me resulta inimaginable que mi madre alguna vez hubiera hecho topless delante de mí, en una playa o donde fuera. Absolutamente inimaginable. Así que es un gran paso adelante el que hemos dado.

A nuestro alrededor, prácticamente en cada aspecto de nuestra vida, se están tomando decisiones por nosotros, para garantizar que pasemos indemnes por este mundo; lo cual deja la imaginación totalmente libre para las consideraciones morales. 

Creo que la gente terminará aburriéndose de alquilar películas (el mercado se está agotando), y entenderá que debe hacer sus propios vídeos. La transformación de la casa en un pequeño estudio de televisión es algo que ya ha empezado a ocurrir. La gente ha comenzado a pensar su hábitat de una manera muy distinta a como se pensaba hace treinta o cuarenta años. 

Ahora la gene decora su casa teniendo en cuenta aspectos psicológicos que eran impensables hace treinta o cuarenta años. Cuando todo esto termine por combinarse con los sistemas de televisión casera, las cámaras, las facilidades de edición y todo lo demás, creo que la gente empezará a comprender que el objeto último y el mejor tema es el ser humano, y comenzará toda una nueva era de exploraciones: incluso las actividades más rutinarias, como afeitarse o hacer unos huevos revueltos, podrán verse por televisión. 

Creo que la exploración del espacio y el tiempo domésticos (como se perciben en la pintura surrealista) va a cambiar. estoy seguro de que esa es la dirección en que todo se mueve, y de que estamos retrocediendo. En los cuatro siglos transcurridos desde el Renacimiento, la Revolución Industrial ha colonizado el mundo externo, llenándolo de máquinas y toda clase de artilugios tecnológicos. Pienso que la humanidad ahora empezará a dibujar de nuevo en su propio cráneo. Habra un giro hacia adentro, y creo que el televisor estará en el núcleo del cambio. Utilizando la electrónica moderna, las cámaras caseras y todo lo demás, uno podrá refugiarse en la propia imaginación. Doy la bienvenida a todo eso. 

Tengo que admitir que en uno o dos casos llegué a arrancar las láminas de los libros que pedía prestados en la biblioteca. 

No diría que el impulso surrealista ha concluido, diría que se ha transformado. Uno tiene que partir de la hipótesis de que no existe una división clara entre la realidad y la súper-realidad, o como quieras llamarla. Hoy sería muy difícil filmar películas que hicieron Buñuel y Dalí a comienzos de los años veinte, ya que la perspectiva de un montón de personas arrastrando un burro muerto por una sala decorada sería interpretada como un truco publicitario de algún comercial de cerveza. La potencia del shock se ha agotado. El mundo exterior es tan extraño, está tan lleno de fantasía, que el enfoque surrealista ya no tiene tanto sentido.

A medida que uno envejece, empieza a acumular lo suficiente de las grandes experiencias de su vida como para construir una mitología personal. 

En la Guerra del golfo sentimos que nos están engañando porque no vemos una serie interminable de combates; necesitamos cámaras por todas partes, necesitamos verlo todo.

Esta guerra podría continuar durante meses. Estoy seguro de que la venta de los periódicos se ha incrementado considerablemente, y la CNN estará recibiendo un aluvión de anuncios publicitarios. 

Quizá Lady Di podría llegar a ser una figura mítica, ya que ha sido completamente fabricada.

La mayoría de nosotros no recibimos información de buena calidad. Por el contrario, tenemos información de segunda mano sobre todas las cosas. No nos llegan los hechos puros ni las noticias puras, las cosas que realmente alimentan la imaginación; nos llegan crónicas aguadas e insustanciales. La información ha sido homogeneizada y trivialidad para que todo fluya sin mayores obstáculos. Ya no existe ese material rugoso y difícil de conseguir, que pasé tanto tiempo buscando para escribir algunos de mis libros. No diré que hago investigaciones formales y exhaustivas, porque de hecho no lo hago, per suelo sumergirme durante un año o dos en la información más consistente que puedo encontrar sobre el tema que voy a tratar. En general, cuando la gente lee periodismo o crónicas, prefiere los detalles insustanciales, ya se trate de la batalla de Waterloo o de cómo se hizo Psicosis, de Hitchcock. La gente quiere estar cerca de la verdad.

Solo hay que mirar a Madonna para darse cuenta de que es algo totalmente fabricado. Al menos esa es mi  impresión -y probablemente estoy poniendo en evidencia mi edad. No obstante, es difícil imaginar a la Madonna “real”, si tal cosa existe. Ahí es donde el papel de los sueños y la imaginación han cambiado. Ese es el motivo por el cual el surrealismo clásico ya no funciona, y el motivo por el cual el escritor tiene que aproximarse a las coas de un modo oblicuo, escrutar detrás de la pantalla, encontrar una puerta en el set de filmación y escabullirse por detrás. 

Uno ve la super-realidad que se cobija en el interior, la cual normalmente no vemos. En pos de ordenar nuestras vidas, de movernos en los espacios que habitamos, de hacer cosas simples como calentar un poco de agua y preparar un té, hablar con nuestros hijos, etc., tenemos que adoptar ciertas convenciones, reducir la extrañeza y familiarizarnos con el entorno; en caso contrario, todo nos resultaría como un paseo en el tren fantasma de un parque de atracciones, y cada vez que alguien abriese una puerta, sería como ver aparecer el tiburón de Spielberg emergiendo de las aguas y aterrorizando a los turistas. La vida sería así.

La manipulación de los sueños es algo muy difícil. Hay gente que dice ser capaz de controlar sus sueños. Nunca pude hacerlo. Reflexiono mucho sobre mis sueños y puedo recordar unos cuantos. A veces creo que si me lo propusiera podría recordar todos los sueños que tuve. Seguramente, no podría hacerlo, pero sí puedo recordar de manera muy vívida sueños que tuve a los treinta años. Si algo de pronto me trae alguna reminiscencia, enseguida pienso: “Dios, me acuerdo de esto, lo soñé hace varios años y puedo recrearlo perfectamente”. Luego, lo olvido hasta que algo me lo vuelve a recordar. 

No, nunca releo mis libros. Es como escuchar tu voz grabada en una cinta de hace cuarenta años, o como ver una foto de cuando tenías dieciocho años. 

El movimiento feminista ha enarbolado buena parte de sus banderas en contra de la pornografía, debido a que es una actividad en la cual se deshumaniza a las mujeres. Pero no estoy tan seguro de que eso sea verdad. Bueno, lo es en el caso de una determinada pornografía que entra en la esfera de lo criminal. Pienso que existe un componente hiper-realista en la mirada pornográfica, que inevitablemente prescinde de cualquier sentimiento humano; pero eso forma parte de la imaginación sexual, que es fuertemente obsesiva. Después de todo, un amante es capaz de fijar su mirada en la oreja de su amada o de su amado, y descubrir en ella todo tipo de magia y de misterio, totalmente separados de cualquier signo de afecto, o lo que sea. Así que no me preocupan los aparentes efectos deshumanizados del imaginario pornográfico. 

Creo que la transformación de la vivienda doméstica en un estudio casero de televisión -donde uno es, al mismo tiempo, escritor, actor y director de su propia serie infinita- es algo que intensificará mucho durante los próximos veinte o treinta años, si no antes.